
Los Romanos, que ya tienen noticia de aquella invasión, le salen al paso. Pero en vano. Batalla tras batalla, año tras año, en invierno como en verano, Aníbal derrota una y otra vez a los romanos. Así que, ya con Roma casi "machacada", Aníbal prefiere darse un respiro. Entre tanto batallar casi se ha quedado sin gente y sin elefantes. Así que prefiere hacer un alto. De forma que Roma resiste y piensa : Tiene que haber algo en España que hace a Aníbal tan fuerte. Y como la mejor defensa es un ataque, los Romanos contraatacan invadiendo España. Tardaron casi doscientos años , pero la conquistaron. Y, como es normal, Roma castigaba desproporcionadamente a los que resistian. Pues como muchos lo hacían, los Romanos entraban en los poblados, saqueaban, violaban a las mujeres y mataban a los hombres (o se los llevaban de esclavos).
Y tanta era la opresión e injusticia que al fin, surge un valiente llamado "Viriato" que los hace frente. Aunque acaba mal : Los Romanos se ponen en contacto con tres de sus capitanes y llegan a un trato. El trato es que si mataban a Viriato, Roma les haría inmensamente ricos. Y así, una noche, Viriato muere de una cuchillada. Pero, cuando los traidores fueron a reclamar su recompensa a Cepión, Cepión les respondió con una frase que mas tarde se hizo legendaria:
"¡Roma no paga a los traidores!"
El ultimo obstáculo de Roma era Numancia. Que también conquisto.
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